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ATIENDE PROTECCIÓN CIVIL 285 INCENDIOS FORESTALES

  • Del 5 de diciembre del 2019 al 27 de abril de 2020 reportan este número de siniestros
  • El sur, sureste, noroeste y centro del estado son las regiones con mayor afectación en número de hectáreas

Zacatecas, Zac.- Del 5 de diciembre de 2019 al 27 de abril del 2020, la Coordinación Estatal de Protección Civil, en coordinación con autoridades federales y municipales, atendió 285 incendios forestales en la entidad, informó Juan Antonio Caldera Alaniz, titular de la corporación. Caldera Alaniz agregó que los siniestros afectaron 953 hectáreas en 44 municipios, los puntos de calor fueron detectados a través del Centro de Monitoreo de la dependencia; 90 por ciento fueron en pastizal y 10 por ciento en zona forestal. Los más afectados: Sombrerete y Jalpa con 266 y 225 hectáreas respectivamente. Dijo que redoblarán la prevención de incendios forestales para evitar mayores daños ecológicos en la entidad, pues el incremento de las temperaturas y la ausencia de lluvias implican mayor presencia de éstos. Por ello, explicó, mantendrá una coordinación estrecha con los otros órdenes de gobierno para establecer las estrategias de combate, control, sofocación de incendios forestales, así como mecanismos que protejan el patrimonio y la integridad física de las personas. Lo anterior incluye el uso de recursos materiales y humanos de las distintas dependencias involucradas, con el fin de atender oportunamente los reportes que realice la ciudadanía durante la presente temporada. Fresnillo -refirió- es el municipio que ha registrado el mayor número de incendios, 57; sin embargo, su afectación ha sido menor en comparación con 12 siniestros en Sombrerete, que perjudicaron 266 hectáreas. Jalpa es otro de los municipios con mayor afectación, con 16 incendios y 225 hectáreas dañadas; Tepetongo, cuatro siniestros y 71 hectáreas afectadas; Mazapil, 70 hectáreas dañadas; Ojocaliente, 60 hectáreas y Nochistlán, 31. Finalmente, Caldera Alaniz advirtió que la etapa crítica se espera para los meses de mayo y junio, porque la presencia de incendios puede prolongarse debido al aumento de la temperatura y la ausencia de lluvia, que trae como consecuencia el llamado efecto lupa.

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