Luego de asegurar que el calentamiento global ya no es un problema del futuro, la Licenciada en Mercadotecnia, Giselle Arellano Ávila indicó que éste es un desafío del presente que debemos parar de inmediato o la destrucción del planeta será irreversible por el cambio climático.

Señaló que el cambio climático es una amenaza real para el planeta que causa estragos en las cosechas, provoca sequías mortales e inundaciones, tal como le sucede a personas que han sido afectadas por sus terribles consecuencias y orillandolas a vivir en entornos más desfavorecidos.

Asimismo, Arellano Ávila destacó que el cambio climático acentúa la desigualdad entre las personas y a muchas de ellas condena a una pobreza cada vez más irreversible,además de que representa un serio riesgo para la salud de las personas, para el futuro de la agricultura y para la biodiversidad del planeta.

En este renglón, es necesario aclarar que entre  el calentamiento global y el cambio climático existe una importante diferencia, a pesar de que el calentamiento global es la causa del cambio climático. Por lo tanto, el aumento de la temperatura del planeta es provocado por las emisiones a la atmósfera de gases de efecto invernadero.

Sin embargo informó Giselle Arellano Ávila, que  la Tierra ya se ha calentado y enfriado en otras ocasiones de forma natural, pero lo cierto es, que estos ciclos siempre habían sido mucho más lentos, necesitando millones de años, mientras que ahora y como consecuencia de la actividad humana, estamos alcanzando niveles que en otras épocas trajeron consigo extinciones en apenas doscientos años.

Mientras que el cambio climático es un cambio de clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la atmósfera mundial y que se suma a la variabilidad natural del clima observada durante períodos de tiempo comparables indicó Giselle Arellano Ávila luego de agregar que El cambio climático es un problema global que alcanza una perspectiva, política, económica y social en la que las peores previsiones también implican enormes pérdidas económicas.